You are here:

Relaciones laborales exitosas: 6 claves

¿Quién no ha tenido alguna vez una mala relación laboral con un colega o líder? Es posible incluso que estas hayan escalado a conflictos que afectaron el rendimiento y logro de objetivos del área o la organización.  Estamos en el terreno de las relaciones laborales.

Sucede más a menudo de lo esperado, una mala o buena relación impactará negativa o positivamente al interior de la empresa o incluso fuera de ella. Por ello, se vuelve determinante saber gestionar las relaciones laborales de forma eficiente, efectiva y proactiva.

Si te interesa construir relaciones laborales y experiencias hacia el cliente interno que generen bienestar e impulsen la productividad en la Pospandemia, estás en el lugar correcto.  

Antes, es importante saber qué son las relaciones laborales y como se relaciona con la experiencia del colaborador, todo inicia por contratos celebrados entre un trabajador y una empresa, en donde a cambio de prestar sus servicios, el trabajador recibe una retribución económica y social.  Estas relaciones pueden darse entre pares, así como también entre los cargos medios y superiores.

Durante mucho tiempo, se creyó que el alcance de estas relaciones únicamente eran de orden legal y laboral, y que el accionar se centraba en resolver situaciones conflictivas con sindicatos y que no estaban integrados a la experiencia del trabajador.  

Hoy en día es tan importante gestionar de manera estratégica y holística la experiencia y relaciones del cliente interno como se hace con las relaciones del cliente externo. Hacerlo puede ser aún más estratégico ya que el primer promotor e impulsor de la empresa es el colaborador que la conoce desde adentro y; por tanto, desde su experiencia, hablará a favor o en contra con su entorno, que en últimas se convierte en un voz a voz. 

¿Cuál es entonces la importancia de gestionar las relaciones laborales y la experiencia del cliente interno? 

Tener un departamento o encargado de relaciones laborales, que monitoree y acompañe a los trabajadores en cada etapa de su ciclo de vida laboral, es importante.

El acompañamiento y entendimiento global de la experiencia del cliente interno, previene y mitiga conflictos, brinda mayores herramientas para la negociación y sedimenta una cultura de la previsión. Esto a la vez que fortalece el relacionamiento y la comunicación que lleva a un mayor compromiso y “enamoramiento” de la organización, su contribución a la sociedad y por ende su propósito.  

Pero vamos más allá, a una causa raíz. Cuando se tiene una adecuada relación con la empresa y con los demás trabajadores, en donde cultura, comunicación y propósito aportan, se generan vínculos de confianza. Como bien menciona Stephen Covey:  “Cuando la confianza es alta, el rendimiento/productividad se acelera. Pero cuando la confianza es deficiente, sucede lo opuesto”.  

Por ello, resulta imprescindible que las relaciones laborales y las experiencias se gestionen de manera holística desde la atracción del trabajador, selección, onboarding, desarrollo hasta su fidelización, es decir durante todo el ciclo. 

TIP ORGANIZACIONAL:  Si deseas lograr resultados sobresalientes en tus relaciones y experiencias con los colaboradores, que te lleven a una productividad exponencial, trabaja toda la estrategia y el ciclo de vida del empleado en torno a un propósito claro, visible, comprendido y sobre todo legitimo para todos.

Solo haciendo este paso previo y teniendo claridad que todos, absolutamente todos, han hecho introspección del mismo y se han “enamorado” de esta forma de vivir, tendremos tierra fértil para actuar al unísono y recoger una cosecha prospera para el colaborador y la organización. 

¿Cuál debe ser el perfil de quien busque transformar las relaciones en su organización?  

Independientemente de si perteneces al área de recursos humanos o eres de otra área, todos debemos procurar que nuestras relaciones y experiencias tanto propias como para los demás sean positivas y por ende se traduzcan en generación de valor.

Estas 6 claves te permitirán establecer una relación saludable con tu equipo y así generar, dentro del contexto VICA que vivimos en la pos pandemia, un entorno organizacional favorable para el desarrollo de la creatividad, rendimiento y productividad exponencial:  

relaciones-laborales-organización

1. Capacidad de negociación:

Una de las más importantes,  pues comprende entender las necesidades o dificultades de la otra persona o grupo para ofrecerles una propuesta que no solo favorezca a la “empresa”, sino que se traduzca en un ganar ganar para todos los interesados.

Recuerda, si la cultura empresarial solo beneficia a grupos cerrados, las relaciones se deterioran. 

También es clave la temporalidad; es decir, actuar en el momento preciso para que una necesidad no se convierta en problema, el problema conlleve a un conflicto y ,aún peor, se desate una crisis.

2. Comunicación:

Es tan importante conectar con el trabajador de manera individual como colectiva. Asimismo, crear espacios de comunicación horizontal y de resolución de dudas ayudará a reducir la incertidumbre. Recordemos que esta última activa algunos procesos en nuestro cerebro que generan reacciones adversas para el resultado esperado. 

Si eres líder y buscas crear relaciones sólidas, transparentes y confiables, debes ser coherente con lo que piensas, dices y haces.  Es necesario liderar con el ejemplo.

2. Proyección y planificación:

Quien planifique y priorice acciones tras analizar las situaciones e indicadores de los trabajadores como; por ejemplo, horas perdidas por conflictos laborales, ausentismo, accidentes de trabajo, rotación, entre otros, sabrá elaborar un plan de acción temprano y hacer proyecciones precisas. Es imprescindible conocer a las personas que están detrás de lo que llamamos colaborador o empleado, solo así podemos encontrar la causa raíz. 

4. Empatía:

Comprender las emociones, intereses genuinos y necesidades del otro, es muy importante para generar compromiso y fidelidad de los trabajadores, incluso podríamos hablar de felicidad. Conócete a ti mismo, reflexiona y encuentra tus oportunidades de mejora y fortalezas para desde allí construir un puente eficiente y permanente para las relaciones con los demás. 

Por ejemplo, en las circunstancias vividas recientemente, supervisar se hace más  complejo con el trabajo remoto, pero sabemos que en muchos escenarios la productividad aumentó. Sería entonces necesario reflexionar el por qué de este hecho tan particular.

Hoy incluso es complejo para muchos países y organizaciones regresar al modelo pre pandemia, porque no satisface las necesidades reales de los trabajadores. Vamos camino a un trabajo híbrido inclusivo y que destine recursos necesarios para que los trabajadores sean realmente felices.

Si bien aun el dinero mueve a las personas, no asegura el compromiso, es más poderosa una conexión emocional con los líderes y la organización que se construye con tiempo, respeto y un propósito legitimo y visible para todos. 

5. Predisposición digital

Hoy en día es indispensable tener predisposición de integrar herramientas digitales al quehacer laboral. La digitalización y adquisición de habilidades tecnológicas aumentan la productividad, siempre y cuando sea gestionada eficazmente desde el factor humano. 

Una verdadera transformación digital no se gesta con un software, es un trabajo contundente con la cultura y la gente. 

5. Accountability

Una de las capacidades más influyentes de un líder es ejercer su función y rendir cuentas por sus acciones y resultados, pero con autonomía y responsabilidad, asumiendo sus errores.

Solo aquel que se analiza y revisa periódicamente desde lo humano hacia el quehacer, logra ir desarrollándose de manera integral para su beneficio y el de los demás. 

Te invitamos a reflexionar sobre estas seis claves y si has identificado algún punto de mejora, con gusto tenemos a nuestro equipo para acompañarte, aplicando una serie de aceleradores, en este camino de evolución continua.

Consulta haciendo clic en este enlace.