¿Cómo gestionar el talento humano en entornos cambiantes?

La gestión del cambio es un tema que cobra cada día más interés en recursos humanos. El entorno VUCA en el que se desenvuelven las organizaciones, demanda que se desarrollen velozmente competencias para afrontar nuevos procesos, implementaciones tecnológicas, e incluso, transformaciones. Todo con el fin de sobrevivir y destacar en el mercado.  

Lastimosamente, varias organizaciones poseen una idea errónea sobre gestionar el cambio, y creen que se trata de ejecutar un plan corto con pasos establecidos. Inclusive, en múltiples ocasiones, se implementa en etapas tardías de los proyectos avizorando un fracaso inevitable.  

Por el contrario, para lograr el escenario deseado, es necesario que los cambios sean gestionados de manera proactiva y desde los inicios de todo proyecto de cambio. Por ello, a continuación, te compartimos seis insumos clave para aumentar la probabilidad de éxito en tu gestión del cambio.  

¿Qué priorizar antes de implementar Gestión del Cambio? 

  1. Hacer una fotografía y/o diagnóstico de la situación actual de la empresa (As Is) para saber cómo se encuentra la gente, la cultura, el liderazgo, la comunicación y el clima para llegar a la situación deseada.  
  1. La clave de todo proceso de cambio está en gestionar el factor humano. Es imprescindible involucrar a la gente, no solo a través de capacitaciones o difusiones informativas, sino convirtiéndolas en protagonistas. Para ello, se necesita crear una visión compartida del cambio, así como estrategias y acciones para lograrlo.  
  1. El plan del cambio debe contener un mapeo de stakeholders para identificar y clasificar a las personas que vivirán el cambio. Asimismo, se recomienda clasificar las posibles barreras e impactos en una matriz de riesgos. Ambos insumos contribuirán para el diseño de estrategias efectivas de sensibilización, negociación y capacitación para las personas.  
  1. Los efectos más recurrentes en una organización suelen ser la incertidumbre, resistencias lógicas y psicológicas. Por ello, es clave haberlas identificado previamente para mitigarlas y facilitar el proceso de apropiación del cambio.  
  1. Finalmente, como sabemos que “lo que no se mide no existe”, al tener un rol importante el factor humano en este proceso, no basta con medir la parte dura de la organización. También se recomienda medir la parte humana como; por ejemplo, percepciones sobre lo que sucede, cómo se encuentra la gente, emociones, sentimientos y más.  

¿Sabías que todas estas recomendaciones, más de 213 actividades y 48 macro actividades para la gestión del cambio las encuentras en la guía metodológica HCMBOK de Human Change Management Institute?  

Impulsa tu formación como futuro gestor del cambio a través del aprendizaje de la guía práctica de HCMBOK, elaborada para que todo profesional pueda aplicarla al interior de las organizaciones. 

Clic aquí para comunicarte con un asesor y conocer más del programa de formación.   

Scroll al inicio